ENTREVISTA EN LA SELECCIÓN DE PERSONAS
La entrevista en la selección de personas es una herramienta que permite indagar en aspectos que son de interés para un empleador. Por lo general, se aboca a obtener distintos datos que, sumados entre sí, se convertirán en una información valiosa para la evaluación del postulante. En ocasiones durante el desarrollo de la entrevista, bastará solo con un par de preguntas bien direccionadas para obtener una respuesta satisfactoria por parte del candidato. Pero, en otras, será necesario idear preguntas disfrazadas para adentrarse en aspectos que dicho candidato no quiere profundizar mayormente. Ello porque podría ser información que le jugaría en contra y por ende perder la posibilidad de contratación. Naturalmente que en una situación así, aparece un mecanismo de defensa o de reticencia para proporcionar estos datos.
Por ejemplo, si el perfil de un cargo requiere de una persona que debe mantenerse atenta en su puesto trabajo y utilizando mucho la concentración para obtener resultados positivos, el uso rutinario de alcohol o drogas podría ser perjudicial para los objetivos de ese trabajo. Por tanto, se desea saber si el postulante ha consumido alguna vez estas sustancias y si lo hace con determinada frecuencia. Lo más probable es que, si el candidato o candidata ha consumido drogas alguna vez en su vida, querrá omitir esa información dado que jugaría en contra para los efectos de obtener el trabajo. Sin embargo, el uso de preguntas circulares, estratégicas o sugestivas, junto con la evaluación de rasgos de veracidad o un análisis cognitivo-conductual que evidencien la información que se desea obtener, sería una excelente forma de confirmar o descartar ese dato.
En este sentido, el desarrollo de una buena técnica de entrevista permitirá ir abordando aquella información que es necesaria para la evaluación del entrevistador e ir cumpliendo con los estándares que exige el cargo. Ahora bien, es importante considerar que la capacidad o la habilidad para conducir adecuadamente un proceso de entrevista, sobre todo en un proceso de reclutamiento o de contratación de personas, se necesita de la formación y el entrenamiento adecuado de los entrevistadores, por cuanto no basta con elaborar un cuestionario de preguntas con posibles respuestas y que pueden ser esperadas por parte del candidato, sino que se debe considerar por ejemplo, entre muchos otros aspectos, la veracidad de la información que proporciona el sujeto.
Y en este caso, ¿Cómo se evalúa la veracidad de la información?
Existen una serie de fuentes por las cuales se puede ir evaluando la información que se obtiene en una entrevista, tanto de forma instantánea como de forma algo más extensa, dado que dependerá de las fuentes que se utilicen para contrastar dicha información. La explotación de fuentes abiertas y cerradas son una excelente alternativa para ir confirmando o descartando la información que se obtiene durante un proceso de entrevista. Por lo general, existen algunos antecedentes previos del candidato que son indispensable contar antes de materializar la entrevista, pero otros deberán quedar a la espera de un chequeo posterior. De ahí que en la formación de entrevistadores se acentúan una serie de aspectos a considerar para ser asertivos al momento de elegir al candidato correcto.
Finalmente, un buen análisis de los antecedentes previos y la entrevista permitirá, entre otras cosas, identificar aquella información que muchas veces el candidato no desea entregar o aquella que no es real en un curriculum.