LAS CONTRADICCIONES
En toda situación de entrevista se genera información que muchas veces no se condice con la realidad, es decir, su fuente primaria (el entrevistado) no provee con la suficiente veracidad, toda la información que requiere conocer el entrevistador. En la investigación de un delito, por ejemplo, existen una serie de variables que van tejiendo la o las hipótesis del caso y por tanto esto implica que los indicios y las evidencias encontradas por los investigadores van dilucidando interrogantes que aparecen dentro de la investigación.
Dentro de ello, la entrevista de víctima (s), testigo (s) e imputado (s) es crucial para generar una narrativa reconstructiva que permita establecer el cómo ocurrieron los hechos y cuál es la participación de cada involucrado en el acontecimiento. Es aquí donde muchas veces aparecen las contradicciones, es decir, elementos discursivos antagónicos de un testimonio que se generan a partir de información que no es real, lo que va sumando datos y antecedentes al caso que deben ser confirmados o descartados.
En muchos casos, las evidencias solo se reducen al testimonio entre una y otra persona, generando puntos divergentes que dan pie a la duda, ya sea porque hay puntos de vista y/o perspectivas distintas o claras intenciones de ocultar la verdad, ¿Cuál verdad?, Aquella que es demostrable a través de las evidencias o, en el ámbito conductual, de rasgos de falsedad que evidencian la mentira.
¿Es posible desenredar las contradicciones?
Por supuesto, una buena técnica de entrevista permite evidenciar todo aquel rasgo verbal improvisado y a su vez, propiciar el revelado de lo que testimonialmente es verdadero.
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